Elaboran el programa «Buenas Prácticas en Turismo Pos Covid-19»
Nuevos hábitos de conducta, seguridad sanitaria, espacios y tratos interpersonales sin discriminación y preservación del empleo son algunos de los puntos de la iniciativa con vistas al reinicio de las actividades.
Nuevos hábitos de conducta, seguridad sanitaria, espacios y tratos interpersonales sin discriminación y preservación del empleo son algunos de los objetivos del programa «Buenas Prácticas Pos-Covid 19», que comenzó a elaborar el Instituto de Calidad Turística Argentina (ICTA), con vistas al reinicio de las actividades en el sector.
Para garantizar el bienestar del turista, el prestador y la población del destino, los máximos organismos oficiales y entidades privadas del turismo, agrupados en el ICTA, buscan tener los protocolos necesarios para el reinicio del movimiento en el país.
La semana anterior, en una reunión virtual, representantes del Ministerio de Turismo y Deportes (Minturdep), el Consejo Federal de Turismo (CFT) y la Cámara Argentina de Turismo (CAT), dieron el puntapié inicial a este programa, que incluirá recomendaciones sanitarias y de atención en las prestaciones de la actividad, en línea con las nuevas demandas globales.
La subsecretaria nacional de Calidad, Accesibilidad y Sustentabilidad, Inés Albergucci, explicó a Télam que «esto es parte de las políticas que lleva adelante el ministro de Turismo (Matías Lammens), complementado con herramientas de asistencia financiera que permitan a los prestadores sobrellevar esta crisis y resguardar los puestos de trabajo».
«Mas allá de esas baterías políticas y de asistencia financiera, una de las cuestiones es cómo implementar prácticas que nos permitan una recuperación más sólida del sector», sostuvo la funcionaria de esa cartera, quien participó del encuentro referido.
La primera fase, de reactivación el turismo interno, «tiene que encontrar a toda la cadena de valor firme, con nuevas herramientas para poder garantizar esta nueva normalidad y una suerte de seguridad para los y las turistas», agregó.
Albergucci señaló que la metodología será «recomendar estas buenas prácticas al sector privado, en un proceso de construcción consensuada con las provincias, y será un herramienta federal» para que apliquen «de acuerdo a sus realidades y necesidades de sus prestadores pueda adoptarla»
Por otra parte, consideró que es importante «reconstruir vínculos, evitar que el turista esté estigmatizado» si llega de una zona de fuerte impacto de coronavirus, y no se lo vea como «portador del virus, sospechoso o el nombre que se le pueda ir poniendo, y ahí estas Buenas Prácticas son una herramienta más de una serie de políticas del Ministerio».
Marcelo García, quien estuvo en esa reunión como secretario de la CAT, contó a esta agencia que fue el primer acercamiento desde el ICTA a la problemática «para poder ya directamente la semana que viene empezar a andar el camino, sobre una hoja de ruta que presentó el Ministerio, sobre la que estamos empezando a trabajar».
Según el empresario «el objetivo es tener los protocolos listos para fines de mayo, con el consenso de la autoridad sanitaria, que es fundamental, como para poder salir en junio a la siguiente acción, que sería la capacitación de los destinos y prestadores».
«En paralelo -continuó- debemos empezar a comunicar a los futuros turistas qué se está haciendo para su seguridad, la de las poblaciones locales y los trabajadores del turismo».
García estimó que el programa de Buenas Prácticas saldrá «como una normativa, que tendrá que ver con la autoridad de aplicación de esto, los gobiernos nacional y provinciales, por eso es importante que estén todos en la misma mesa, para asegurar homogeneidad, en un principio general, que pueda adaptarse a todos los destinos».
También advirtió que cuando el turismo vuelva a funcionar, habrá que cumplir una serie de requisitos mínimos de seguridad sanitaria, «porque vamos a seguir conviviendo con el virus hasta que llegue la vacuna».
Entonces, continuó, «habrá que atenerse, como hoy los bancos y otros servicios que funcionan, a medidas que ya no serán de aislamiento sino para garantizar condiciones básicas de salubridad, higiene, separación de la gente».
Esto es «necesario que sea a nivel nacional», puntualizó, «si no, va a haber normativas diferentes en cada jurisdicción, lo que desalentaría al turista», al encontrar reglas propias de cada lugar que visite o transite en su viaje.
Algunos objetivos básicos establecidos en el encuentro del ICTA son generar hábitos de conducta que garanticen mayor seguridad y confianza a visitantes y visitados, seguridad sanitaria, evitar el quiebre del vínculo turístico/social, promover relaciones amigables, solidarias y respetuosos, sin discriminación, y preservar las fuentes de trabajo.- (Télam/CsM)
