Cronicas del Sur

Aumenta la deforestación a nivel global: Avanzó sobre 6,6 millones de hectáreas en 2022

Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp

La deforestación a nivel mundial se incrementó en 2022 unas 6,6 millones de hectáreas, lo que implica un crecimiento interanual del 4% y la continuidad del incumplimiento de la Declaración de Nueva York sobre los Bosques, firmada en 2014 para su protección, según un informe de la Organización Mundial de la Conservación (WWF, en inglés). En Argentina, la tendencia es similar, aunque hubo algunos éxitos en conjunto con Brasil y Paraguay respecto del Bosque Atlántico y la Selva Misionera.

La Declaración de Nueva York sobre los Bosques, firmada por 30 países, tenía como objetivo acabar con la deforestación para 2030 y restaurar esas masas verdes que absorben un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero, albergan el 80% de la biodiversidad terrestre y proporcionan medios de vida a más 1.600 millones de personas. Sin embargo el proceso continúa y los bosques siguen desapareciendo, lo que según la WWF tendrá impactos catastróficos para el planeta y las personas.

Según el informe, en todo el mundo se destinan al menos 100 veces más fondos públicos a subvenciones perjudiciales para el medio ambiente que al financiamiento de los bosques. En Latinoamérica, la deforestación es considerada «alarmante», a diferencia de Asia, donde  disminuyó. En su propuesta “Senderos forestales”, WWF incluye un plan para alcanzar los objetivos globales de restauración y protección de los bosques al 2030.

Los ejes de esa iniciativas son:

«Movilizar flujos financieros masivos, tanto públicos como privados, y redirigir los dañinos hacia el apoyo a economías verdes y comercios forestales sostenibles.

Reformar las normas del comercio mundial que perjudican a los bosques, eliminando de las cadenas mundiales de suministro las materias primas que deforestan y quitar barreras a aquellos productos con certificaciones positivas con los bosques»; acelerar el reconocimiento de los derechos territoriales de los pueblos originarios.

Avanzar con el cambio hacia economías basadas en la naturaleza«.

ARGENTINA

La Fundación Vida Silvestre Argentina, que representa a WWF en el país, señaló que a nivel local se sigue la misma tendencia y la deforestación en 2022 fue de 212.000 hectáreas, lo que representa un aumento del 4% con respecto a 2021. Los monitoreos realizados por la Nación indican que entre 1998 y 2022 se deforestaron 6,4 millones de hectáreas de bosque nativo, principalmente por causa del avance de la frontera agropecuaria.

Argentina cuenta con la Ley 26.331 de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos, de 2007, para planificar el uso de estos ecosistemas y lograr equilibrar producción y conservación de la naturaleza. Sin embargo, su implementación fue parcial. «Los bosques nativos de Argentina siguen perdiéndose en zonas donde está prohibida la deforestación por su alto valor de conservación, en las cuales se avanza con el cambio de uso del suelo para actividades agropecuarias, forestales, urbanísticas y viales«, señala un comunicado de Vida Silvestre.

Luego advierte que «las áreas deforestadas ilegalmente y las que se han quemado, no están siendo restauradas como indica la ley, y hay ausencia de un registro nacional de infractores imposibilitando la disuasión y la sanción de los responsables«. Un 76% de la deforestación en Argentina es ilegal, ya que ocurre en zonas prohibidas por la ley.

 El informe sobre causas e impactos de la deforestación señala que el 87% del bosque nativo perdido correspondió a la región Chaqueña y el 43% ocurrió durante la vigencia de la actual Ley de Bosques.

Ecosistema El Cerrado, Brasil

CASOS DE ÉXITO

El informe “Senderos forestales” de WWF menciona ejemplos de éxito a nivel global, entre ellos el de conservación y restauración del Bosque Atlántico, gracias a la colaboración trinacional (de Argentina, Brasil y Paraguay), aunque destaca que es necesario aumentar y amplificar los esfuerzos que se vienen realizando. El Bosque Atlántico es uno de los de mayor biodiversidad del planeta; se extiende por la costa oriental de Brasil y se adentra en Argentina -Selva Misionera – y Paraguay.

«Más de 148 millones de personas viven y dependen social cultural y económicamente de los servicios ambientales (agua, energía, protección del suelo, entre otros) que brinda el Bosque Atlántico«, precisa el texto, y añade que además alberga el 7% de las especies de plantas y el 5% de las especies de animales vertebrados del mundo. Muchas de estas plantas y animales son endémicas, lo que significa que no existen en ningún otro lugar del mundo.

Originalmente, el Bsoque Atlántico cubría 1.345.300 kilómetros cuadrados, pero en los últimos 40 años -según información de MapBiomas- se redujo por la deforestación, la urbanización y la producción, y en la actualidad ocupa el 24% de su superficie original. En Argentina, en el mismo periodo se perdieron el 17% de los bosques de esta ecorregión (305 mil hectáreas).

No obstante, los esfuerzos de conservación y restauración realizados por organizaciones como la Fundación Vida Silvestre Argentina y WWF Brasil, entre otras agrupadas en la Red Trinacional de Restauración del Bosque Atlántico y Pacto por la Restauración de la Mata Atlántica, colocaron al Bosque Atlántico como Iniciativa Emblemática de Restauración Mundial por Naciones Unidas.

La coordinadora de paisajes terrestres de la Fundación Vida Silvestre, Lucía Lazzari, manifestó que “los bosques tienen, además de un valor ecológico, un importante valor económico, social y cultural. Es imposible hacer frente a la crisis climática, desarrollar economías sustentables y revertir la pérdida de naturaleza, sin los bosques«.

«No es necesario generar nuevos objetivos para frenar la deforestación –continuó-, se debe cumplir con las ambiciones y objetivos ya planteados, ya que lamentablemente la pérdida y degradación de los bosques persisten a pesar de todos los compromisos, y declaraciones locales y globales”.- (CsM)

Facebook
Twitter
LinkedIn
Pinterest
Pocket
WhatsApp