Aunque la palabra «champagne» suena más fascinante y glamorosa, no se lo puede llamar oficialmente de esa manera, porque Francia ha hecho valer sus derechos de denominación de origen internacionalmente y nadie más que sus productores de la región homónima del norte del país puede usar esa marca. El término se castellanizó a champaña o champán, pero ya no era lo mismo, por lo que en Argentina se llama «espumante» ese vino joven que se produce al pie de la cordillera y a veces luce y sabe tan bien como su par francés.
Si bien el proceso es lento y muchos en Argentina sigue hablando de champaña, Mendoza celebra en estos días la Semana del Espumante, con epicentro en el departamento sureño de San Rafael, uno de los principales productores del país de este tipo de vino. 
Allí se realizan diversas actividades al aire libre y dentro de bodegas, hoteles y en la Universidad Nacional de Cuyo, que incluyen las infaltables degustaciones, más actividades gastronómicas, artísticas y culturales, con el marco imponente que dan los valles y la Cordillera de los Andes.
Lejos de lamentar el cambio de nombre, la actividad apunta a afianzar la marca «San Rafael Tierra de Espumantes», dado que en este departamento se elabora el 20% de lo que se consume en Argentina de esta bebida y el 35% de lo que exporta el país. Ésta es la segunda edición de la Semana del Espumante, luego de la realizada en febrero del año pasado, considerada «exitosa» por los organizadores, y que viene a sumarse como otro atractivo a la oferta de turismo aventura y de naturaleza que atrae numerosos visitantes.
Este año, la Semana del Espumante integra la agenda del Verano-Vendimia 2016 de la provincia de Mendoza, cuya propuesta es de unas 60 actividades culturales y de esparcimiento para todos los gustos.
Desde la Cámara de Bodegueros local, Pablo Asens destacó que «San Rafael tiene un potencial único gracias a las uvas blancas que se desarrollan muy bien en esta zona del sur mendocino”. 
En declaraciones a la agencia de noticias Télam, el bodeguero señaló que “en 1995 el espumante era una categoría que no existía y de ahí pasó a representar hoy el 20% del consumo de vino en Argentina. El espumante ya no es sólo una opción para las clases altas, sino que se ha democratizado y estandarizado dado que hoy hay muy buena calidad a precios accesibles”.
Los organizadores esperan que durante la Semana del Espumante el turista disfrute de las actividades y del vino, en una ciudad con una raigambre enológica muy importante, y sueñan con que San Rafael pueda ser la Capital Nacional del Espumante. En San Rafael hay una veintena de bodegas productoras de espumantes, algunas de renombre internacional como Mum, Bianchi, Murville o el Grupo Peñaflor, que despachan al exterior el 35% de lo producido en Argentina, en tanto siete de ellas lanzaron al mercado un espumante propio bajo la marca genérica San Rafael Tierra de Espumantes.
ACTIVIDADES
La Semana del Espumante comenzó el viernes 5, cuando en la bodega Casa Bianchi hubo jazz en vivo, picadas y degustación de este vino; siguió el sábado al mediodía, con una propuesta gastronómica y muestra de arte en bodega Murville, que esa noche presentó su espumante en un boliche bailable.
Hoy, la cita es en la Facultad de Ciencias Aplicadas a la Industria de la Universidad Nacional de Cuyo, donde se hará una cata con maridaje; mañana habrá una degustación dirigida en el Multiespacio del hotel Vecchia Terra y el miércoles, en plaza Francia, se realizará una exposición de autos antiguos.
El jueves será el turno de la finca El Nevado, con la Noche de Jazz & Soul, que incluirá gastronomía, espumantes y show en vivo, y el viernes, en bodega La Abeja, otra propuesta gastronómica con especial menú de chivo al tablón.
Esta serie de festejos apuntan a mostrar el toque distintivo de San Rafael, que son sus uvas blancas y el Consorcio San Rafael Tierra de Espumantes que hoy integran Familia Camargo, Bournett, Zanetti, La Abeja, Murville, La Vieja Bodega y Fecovita.- (CSM)
