La Administración de Parques Nacionales (APN) difundió una serie de consejos y normas destinadas a los turistas, en especial excursionistas, que visiten sus reservas naturales durante esta temporada. Entre las principales recomendaciones figuran el registro al ingresar a zonas agrestes y contar con un estudio previo del lugar y constatar pronóstico meteorológico antes de ingresar a zonas agrestes.
El material difundido este martes por la APN apunta a los miles de visitantes que ya comenzaron a llegar a los múltiples atractivos -en especial de turismo de naturaleza o de aventura- que albergan sus jurisdicciones. La mayoría de los destinos turísticos argentinos se encuentran dentro o vecinos y en combinación con alguno de los parques nacionales.
CONSEJOS
Una de las recomendaciones más importantes es respetar el registro gratuito y obligatorio, antes y al finalizar una travesía, lo que permite a las autoridades advertir si alguien no regresó de un paseo y tomar las medidas para un eventual rescate. Para quienes elijan pernoctar en refugios de montaña de los parques andinos, que tienen sus dinámicas propias de alojamiento y capacidad de carga, se aconseja realizar las reservas antes de emprender el ascenso.
Los entornos naturales de los parques nacionales cuentan también con sistemas de señalética y mantenimiento, así como senderos determinados, acordes a estándares de seguridad internacionales para las diferentes categorías de caminantes, a los que es necesario ajustarse.
En todos los casos se aconseja ir con guía y respetar las indicaciones de los guardaparques y de la cartelería, ya que existen reglas básicas para realizar caminatas en zonas agrestes, más allá del grado de dificultad de cada sendero -que también se debe tener en cuenta- y de la capacidad física y experiencia de los caminantes. En las oficinas de informes y centros de visitantes de los parques se dan a conocer datos fundamentales para la seguridad de los senderistas ante una emergencia, por lo que es imprescindible contar con esa información que permite implementar los protocolos de seguridad, auxilio y rescate ante una emergencia.
«Todas las caminatas deben ser planificadas y es recomendable hacerlas en compañía de alguien, con indumentaria y equipos adecuados», precisa un comunicado, que agrega que «también se debe tener en cuenta el pronóstico del clima, que suele ser cambiante». En las zonas de precipitaciones y vientos fuertes es frecuente la caída de árboles y ramas, lo que puede ocasionar el cierre de senderos en las áreas boscosas y demorar el regreso o ser causa de extravío del visitante.
Un lesión o malestar corporal leve, que en el ámbito urbano se resuelve pronto, con un traslado rápido a un centro de salud, en las zonas agrestes puede complicarse al no existir esa facilidad, por lo que es necesario actuar con rapidez ante el mayor margen de tiempo y la logística especial que requiere un traslado en ese ambiente.
En muchas áreas silvestres no hay conectividad para teléfonos celulares, lo que debe ser contemplado por senderistas y por quienes realicen actividades náuticas y acuáticas. Muchos de los cursos y espejos de agua de los parques nacionales estánb además enclavados en escenarios remotos, por fuera de las áreas de cobertura de telefonía celular.
Otra recomendaciones, más habituales para los turistas, son la de no ingresar con mascotas; sólo hacer fuego en lugares habilitados; consultar el estado de las rutas, caminos y senderos internos y el pronóstico del clima y no afectar en medida alguna el ambiente. En este último aspecto, la APN advierte que se deben producir ruidos molestos ni extraer plantas o piedras, mantener una distancia prudencial para observar a los animales, sin alimentarlos ni perseguirlos, y regresar del área protegida con los residuos generados y depositarlos en los contenedores habilitados de las áreas urbanas.- (CSM)