Como un arco iris de 27 colores que desciende y permanece sobre el valle de Trevelin, cada octubre las plantaciones de tulipanes reverberan en la Comarca Andina de Chubut, en un espectáculo singular que atrae cada vez más turistas. Se trata del único sembradío de esta especie en Argentina, sobre la Ruta Nacional 259, en las afueras de esa ciudad y a unos 40 kilómetros de Esquel, en el norte provincial.
Si bien esta región es una de las más pintorescas de la Patagonia Andina, con sus contrastes de campos verdes y amarillos, lagos, nieves, coloridos pájaros y flores silvestres, bajo un diáfano cielo azul, al llegar a la plantación en primavera el turista se encuentra con un paisaje distinto, como una prolija paleta de pintor que se extiende hacia la cordillera casi a ras del suelo, ya que la planta tiene una altura de 20 centímetros.
El impacto visual del campo con tulipanes en flor le dio trascendencia a esta actividad originalmente productiva, y actualmente sus dueños organizan visitas turísticas durante octubre, el único mes en que se puede disfrutar de estas exclusivas postales, a tal punto que el año pasado hubo un encuentro de pintores paisajistas al óleo, interesados en plasmar imágenes de este lugar.
No obstante, el cultivo de esta flor que simboliza la elegancia y la distinción comienza en mayo, con la siembra, y finaliza en enero, cuando se cosechan los bulbos que luego son distribuidos al mercado argentino, en especial a Buenos Aires. Las semillas provienen de Holanda, el mayor productor y exportador mundial de flores, y encuentran en el clima del Valle 16 de Octubre un lugar ideal para desarrollarse y alcanzar su mejor calidad.
El campo de tulipanes de Trevelin fue creado hace unos 18 años por Juan Carlos Ledesma, dueño de la chacra, quien organiza las visitas en las que el turista, ademas de extasiarse con los colores y aromas, también puede informarse y presenciar las técnicas de floricultura sobre esta especie. Además se pueden realizar largas caminatas por el valle, con el telón de fondo de la cordillera, donde resalta la figura del nevado Gorsedd y Cwmwl, que significa ”Trono de las nubes” en galés, porque en esa región está asentada una de la comunidades galesas más importantes de la Patagonia y del país.
Ledesma comentó que en su chacra tiene “27 variedades de tulipanes que le dan un marco colorido al paisaje patagónico, rojos, amarillos, blancos, violetas, de doble flor, entre tantas otras, pero el tulipán de flor negra es una de las características distintivas de nuestra producción”.
El emprendimiento familiar, Plantas del Sur, tuvo altibajos desde sus inicios en 1997, cuando la superficie de cultivo era de 800 metros cuadrados; lograron extenderla a seis hectáreas e inclusive a exportar tulipanes a Holanda, pero en 2011 las cenizas del volcán chileno Puyehue arrasaron con gran parte de los campos, y tras un duro esfuezo de recuperación actualmente la plantación ocupa cuatro hectáreas.
El campo está abierto para visitas hasta mediados de noviembre, cuando se acaban las flores, de 8 a 18, y son aranceladas para mayores de 12 años, con tarifas de 80 pesos y, en caso de grupos o familiares de cuatro personas, 50 pesos cada una. Los paseos guiados pueden durar desde 15 minutos hasta una jornada completa, según el interés del visitante.- (CsM)